En lo alto de un mar de niebla, en la cima de las montañas más altas, protegido por leyendas y espíritus benévolos reside un pequeño santuario. Durante largos meses, el invierno ha estado instalado en la tierra y su frío reinado ha dejado a vivos y muertos congelados y hambrientos de calor. Muchos han intentado sobrevivir, escondiéndose bajo capas de hojas y nieve aferrándose a lo poco que les quedaba de los meses más luminosos. Otros simplemente intentaron escapar cayendo en un profundo sueño.

Sin embargo, el interminable círculo avanza en constantes rondas, y cada vez que comienza un nuevo año el santuario y sus habitantes estallan en una agitada excitación, pues la primavera descenderá a la tierra y teñirá la naturaleza de vibrantes colores y radiantes rayos de luz.

Naturalmente, hay muchas cosas que preparar y muchas tareas que completar antes de que todo esté listo para un acontecimiento tan festivo. Hay que preparar vino y ofrecerlo para apaciguar a los espíritus que habitan en las montañas, barrer y limpiar el santuario de la mala suerte y los restos del año anterior, e incluso es recomendable hacer donaciones para la buena suerte, la salud y la prosperidad.

Despierta el espíritu de la primavera con una música encantadora y esperemos que todo el buen Qi reunido llame a la primavera y permita que los hermosos membrilleros florezcan de nuevo llenando el aire con su encantadora fragancia.